La batalla legal entre Mireddys González y Daddy Yankee ha llegado a su fin con un fallo judicial a favor de González. El juez determinó que el caso no requería más deliberaciones, cerrando así el litigio sobre las corporaciones del cantante puertorriqueño.
El conflicto legal y su desenlace
El litigio comenzó en diciembre de 2024, cuando Daddy Yankee, cuyo nombre real es Ramón Ayala, descubrió que las hermanas González habían transferido 100 millones de dólares desde las cuentas de sus empresas sin su autorización. Esto desató una disputa judicial que ahora ha sido resuelta por el magistrado Anthony Cuevas.
Según el fallo, no fue necesario un juicio prolongado, ya que el magistrado consideró que la documentación presentada era suficiente para tomar una decisión definitiva.
Los tres acuerdos clave del fallo
- Daddy Yankee retoma el control corporativo
- Se ratificó que Daddy Yankee asume la presidencia de las entidades corporativas, un acuerdo previamente tomado a finales de diciembre de 2024. Desde esa fecha, el reggaetonero ha tenido el control total de estas empresas, y el fallo judicial formaliza esta decisión.
- Fondos protegidos
- Los 75 millones de dólares que se encuentran en las cuentas de las entidades corporativas permanecerán intactos y no podrán ser utilizados ni transferidos sin autorización. Esta medida busca garantizar la estabilidad financiera de las empresas.
- Transparencia financiera
- Daddy Yankee se compromete a rendir un informe mensual a Mireddys González sobre los asuntos financieros relacionados con las corporaciones. Este mecanismo de supervisión busca garantizar la transparencia y el cumplimiento de los acuerdos establecidos.
Conclusión del juez
El magistrado Anthony Cuevas concluyó que el acuerdo alcanzado permitía una transición ordenada en la administración de las empresas y cumplía con los intereses de ambas partes. Con la emisión del fallo, se pone fin a una disputa que generó tensión en el entorno del reconocido artista y su esposa.
Ahora, con esta decisión legal, Daddy Yankee retoma el control de sus corporaciones bajo estrictas condiciones de supervisión, mientras que Mireddys González mantiene una posición clave en la supervisión financiera de las entidades en disputa.
